Cuando pensamos en hacer ejercicio, solemos imaginar rutinas intensas, mucho sudor y cansancio extremo. Pero hay otra forma efectiva y amable de moverse: los ejercicios de bajo impacto. Son ideales para personas mayores, quienes están comenzando a hacer actividad física o para quienes tienen problemas en las articulaciones.
¿Qué Son los Ejercicios de Bajo Impacto?
Son rutinas que no sobrecargan las articulaciones, como las rodillas, la espalda o los tobillos. Son suaves, fluidas, y suelen mantener al menos un pie en el suelo en todo momento. Aun así, mejoran la salud del corazón, ayudan a mantener un peso saludable y fortalecen los músculos.

Ejemplos Populares:
- Caminar al aire libre o en una caminadora
- Nadar o hacer aeróbicos acuáticos
- Andar en bicicleta estática o tradicional
- Yoga suave o con silla
- Pilates básico
- Ejercicios con bandas de resistencia
Beneficios de los Ejercicios de Bajo Impacto
- Menos riesgo de lesiones
- Alivio en articulaciones y músculos
- Mejor flexibilidad y equilibrio
- Reducción del estrés
- Aumento de energía
¿Cómo Empezar?
- Dedica 20–30 minutos al día, 3 a 5 veces por semana
- Escoge actividades que realmente disfrutes
- Escucha a tu cuerpo: si algo duele, modifica o descansa
- Mantente hidratado y calienta antes de comenzar
Lo Más Importante: Ser Constante
No necesitas un gimnasio ni ropa deportiva cara. Puedes empezar con lo que tienes en casa. Lo importante es moverte de forma regular. Si eres constante, verás beneficios tanto físicos como emocionales.
En Dr. GoodPrice apoyamos a nuestros pacientes para que elijan la actividad que mejor se adapte a sus necesidades, sin presión ni exigencias. Moverte con amabilidad también es cuidarte.
Sigue todos nuestros artículos de blog y
¡Síguenos en redes sociales! Facebook Instagram
Descargo de responsabilidad
Esta publicación de blog es solo para fines informativos y no constituye un consejo médico oficial. Consulte siempre con un profesional de la salud para obtener asesoramiento médico y tratamiento adaptado a sus necesidades específicas. No pretende diagnosticar, tratar, curar o prevenir ninguna enfermedad. La información proporcionada no sustituye una consulta con un médico u otro profesional de la salud calificado. Si tienes síntomas, condiciones médicas preexistentes o dudas sobre tu salud, consulta con un médico antes de tomar cualquier decisión basada en este contenido. En caso de emergencia médica, busca atención de inmediato en un centro de salud o llama a los servicios de emergencia.